Hoy, hace exactamente dos años que publiqué mi primer artículo en Substack.
El 7 del 7 del 2023. Ahí comenzó oficialmente mi andadura “Substackera”. El año pasado, para celebrar mi primer año, me marqué una serie de 7 publicaciones en las que compartía mis aprendizajes y reflexiones. En esa colección hablé de: compromiso, creatividad, comunidad, pulir tu voz, objetivos, suscriptores y membresía privada.
Este año, traigo una única publicación + un círculo de encuentro gratuito vía Zoom el próximo domingo, 13 de julio.
Los puntos que vas a encontrar en esta publicación son los siguientes:
Lo que ha cambiado durante este segundo año
El detrás de escena: lo invisible
La evolución de Substack como plataforma
Constancia: mantenerle el pulso a la escritura semanal
Tu voz y tú
Suscriptores. Comunidad. Membresia y engagement
Curso Substack de Cero a Cien y acompañamientos personalizados
Tres publicaciones que me han marcado (y por qué)
Círculo Abierto sobre Substack
Tengo sentimientos encontrados al comenzar a escribir esta publicación. Sé que quiero hacerla pero me está resultando difícil enfocarla. Mucho ha cambiado desde que “The Journal” nació como un mini-proyecto creativo hace dos años. En aquel momento, buscaba un lugar en el que expresarme y comunicar lo que para mí era importante. Un lugar donde desarrollar y anclar mi escritura. Lo de crecer, conectar o emprender, era secundario.
Y sin preverlo, Substack se ha convertido en un pilar fundamental de mi emprendimiento: mi comunidad empezó a crecer, los comentarios “profundos” que me invitaban a reflexionar de vuelta aparecían con asiduidad, los primeros clientes de mis cursos de escritura introspectiva llegaban, diseñé la primera edición del curso Substack de Cero a Cien porqué detecté ese ‘gap’ en el mercado, conecté con
, aparecieron los acompañamientos personalizados de Substack y después la membresía privada: Release Yourself. Todo esto durante el primer año.1. Lo que ha cambiado durante este segundo año
En este año…he cambiado yo y ha cambiado Substack. En el lado interno, este segundo año, ha sido para afianzar mi escritura. En este momento, no paso tanto tiempo en ‘Notes’ o conectando con otros creadores en la plataforma porque ese tiempo ha estado dedicado a mi empresa. Por lo tanto, el tiempo que dedico a Substack, lo he dirigido a seguir puliendo mi estilo.
Un año más reflexivo para dejar que ‘The Journal’ tomase su carácter propio. Ahora siento que ‘The Journal’ representa una parte importante de quién es Julia y del conocimiento que quiero transmitir: escritura y journaling, procesos creativos, filosofía del Yoga, paisajes emocionales. Un lugar que te invita a explorar y cuestionarte para crear tu camino único. Este segundo año también ha sido para explorar más de cerca mis ritmos creativos.
2. El detrás de escena: lo invisible
Me siento afortunada de que la escritura sea un pilar importante en mi emprendimiento y de que sea parte de mi estrategia porque es algo que nace de dentro, una necesidad primitiva. Pero reconozco que hay momentos en los que se convierte en una “actividad más”. Algo que antes romantizaba, ahora es un “time block”.
No obstante, los instantes en los que me siento a escribir siguen siendo los más puros, los de más apertura, los que cambian mi mood. Les sigo reservando mis momentos “pico” del día: mis mañanas, después de hacer yoga o de hacer journaling. O los momentos de relax en los que las ideas fluyen.
Lo que estoy echando en falta es tiempo de divagación. Ese tiempo que durante mi primer año parecía “ilimitado” y que invertía en crear, pensar, desarrollar ideas, tomar notas, poblar mi calendario editorial, leer a otras personas en Substack, comentar, colaborar…ahora se ha visto coartado por sostener un negocio digital con varios servicios en órbita simultáneamente.
Uno de mis deseos para la segunda mitad del 2025, es un calendario estratégico con más holgura entre lanzamientos que me deje ‘thinking weeks’. Sé que debo hacer hueco para ese tiempo de divagación porque es importante y es lo que me recarga la ilusión.
3. La evolución de Substack como plataforma
Substack está creciendo. Hay más inversión. Más expansión. Más “features”. Más Newsletters en Español. Más posibilidades de crecimiento, de conexión y de que tus palabras lleguen a más personas. Sin olvidar la opción de monetizar tu contenido. Este crecimiento de la plataforma, tiene muchos pros y viene con algún que otro coste. Substack sí “premia” a las personas que pasan más tiempo en la plataforma, publicando e interactuando en Notas, conectando con otros escritores y a los que publican con más frecuencia. Por eso cada vez son más frecuentes las “Newsletters diarias” o los “retos en Notas”. No hay nada malo en eso, pero sí viene bien estar consciente de que eso ocurre.
En mi opinión, Substack sigue ofreciendo muchísimo (por eso estoy aquí) y continúo con mis acompañamientos y el Curso Substack Cero a Cien. Soy consciente de su potencial. Pero también recomiendo conocer nuestro proceso creativo y saber el porqué y el para qué estamos publicando aquí. Por ejemplo, yo sé que publicar contenido diario de calidad, no es sostenible para mi, por mucho que quiera que nuevos suscriptores lleguen a “The Journal”. También sé que ahora mi prioridad no es crecer la publicación como tal, si no dar un servicio óptimo a las personas que ya han apostado por mi, por eso sacrifico pasar ese tiempo en “Notas”. En el momento que mi prioridad cambie, cambiaré mi modus operandi. Es cuestión de conocer las reglas del juego.
En febrero publiqué una serie de 3 publicaciones en la que hablé un poquito más en profundidad de alguno de estos temas: Cómo Publicar en Substack había impactado a mi proceso creativo, a mi emprendimiento y me había influido a un nivel personal.
4. Constancia: mantenerle el pulso a la escritura semanal.
A pesar de los cambios internos y externos, la premisa durante este segundo año ha sido la misma que durante el primero: seguir publicando cada domingo. ‘The Journal’ cuenta a día de hoy con 121 publicaciones (entre gratuitas y de pago).
Esto es parte de lo que predico: ser constante. Un granito de arena cada día. El no esperar a que la motivación, ni la inspiración te encuentren. Que te presentes tú primero. Y eso es lo que hago. Semana tras semana, me apetezca más o menos.
Escribir, escribir, escribir. Sin cuestionarme mucho cómo estoy de ánimo. Cada semana, conecto con mi intuición y escojo un borrador de mi piscina de ideas o creo uno nuevo si lo considero pertinente. Actuar así, me permite compartir una versión real y actualizada de “Julia”.
No obstante…en marzo de 2025 necesité parar unas semanas. Necesitaba reconectar conmigo. Una cosa es cumplirse y mantener tu calendario y otra es ir en piloto automático.
«la única forma que existe ahora para seguir creando, es volver a conectar conmigo, de forma íntima»
Los momentos de recarga y descanso son importantes. Momentos para llenar el pozo creativo como diría Clarissa Pinkola Estés. Por eso no descarto tomarme otro descanso durante los meses estivales. Y la idea de bajar la frecuencia de publicación, también está rondando mi cabeza.
5. Tu voz y tú
Escribe, escribe, escribe. Es la única forma de explorarse. Crea contenido sincero. Un proyecto sólido en Substack requiere de constancia y tiempo.
Y esto es algo que quiero compartir con cualquier persona que esté comenzando a publicar aquí: date el tiempo y disfruta de ese proceso. Por eso, al principio, es todavía más importante no dejarse “arrastrar” por las premisas de Substack para crecer en la plataforma. Crea desde tu centro. Explora tus temas y permite que evolucionen contigo. Que reflejen tus deseos, ensoñaciones, lecciones…
6. Suscriptores. Comunidad. Membresia y engagement
A día de hoy, somos 2467 suscriptores en ‘The Journal’. Como he mencionado, en este momento, no estoy aplicando técnicas de crecimiento como tal. Lo que busco es una comunidad más “engaged”. No obstante, reconozco que en el último año, mi tasa de interacción pasó de un 33% a un 16%. A mayor número de suscriptores, suele ser más difícil mantener una tasa de interacción alta. Unido a lo comentado anteriormente, cada vez hay más newsletters, con todas sus ventajas pero también su inconveniente: más dónde elegir, menos tiempo para “quedarse”. Por eso es importante invertir tiempo para conectar en la plataforma. Y como ya he comentado, es ese tiempo lo que echo en falta con respecto al primer año.
Respecto a la membresía de pago -Release Yourself-, llegó a su punto álgido el verano pasado, con 54 suscriptores “premium”. No obstante, ahora está en pausa desde febrero. Fruto de conectar con mis ritmos creativos, me he dado cuenta de que a veces se me complica sostener una creación de contenido mensual. Mi proceso es un poco más largo. Me gusta crear cursos, talleres, círculos de escritura cada 3 ó 4 meses y eso es algo que no se adapta al modelo de negocio de Substack. Por eso estoy creando mis workshops fuera de la plataforma. No obstante…estoy dándole una pensada a cómo puedo traer mis talleres de vuelta aquí, sin que implique creación de contenido mensual. Os mantengo al tanto😉
Algunos de los temas que más disfruté trabajando en “Release Yourself” fueron":
7. Curso Substack de Cero a Cien y los acompañamientos personalizados.
Estos son mis dos servicios relacionados con Substack. El curso “Substack de Cero a Cien” es una guía completa de la plataforma, Más allá de navegarla y aprender de métricas o estadísticas, es un curso diseñado para que establezcas que quiere nacer a través de ti y cómo Substack puede apoyarte en ese camino. Ya estoy preparando la tercera edición.
En los acompañamientos personalizados, pongo mi mente creativa al servicio de tu proyecto. Te doy orden, estructura y claridad para que construyas con confianza. Abro la agenda de nuevo de estos acompañamientos el 17 de julio, por si te interesa trabajar conmigo 1 a 1.
Estos servicios, seguro se quedan durante 2025 y 2026.
8. Publicaciones que me han marcado (y por qué)
Para cerrar estas reflexiones compartidas, quería compartir algunas publicaciones que me han marcado. Me han marcado…no tanto por las interacciones o impacto que han generado, si no por lo que supuso para mi escribirlas. Me movieron porque las escribí en etapas sensibles y me mostré vulnerable. Sin respuestas o sin compartir aprendizajes.
Lugares seguros. Lo escribí al volver de mi estancia en Tailandia. Lista para volver a volar. Pero al volver a mi “lugar seguro” supe que necesitaba quedarme más tiempo.
Saltar. Hacerlo con miedo. En este artículo hablé de los saltos, a veces valientes, otras veces cubos de agua fría por parte de la vida y otros, huidas hacia delante. He tenido de todos. En el momento de escribir ese artículo, atravesaba uno más. Uno que me invitaba a romper con una versión muy afianzada de Julia.
Vivir en gris. Aceptar lo que es. Aquí compartí la que está siendo una de mis lecciones del 2025. No tender a los extremos. Apreciar los matices. La vida puede ser sencilla pero no es simplona. Hay espacio para todo. Es más, debemos apreciar ese todo
9. Círculo Abierto sobre Substack y Q&A
Hasta aquí ha llegado mi recapitulación de este segundo año publicando en Substack. Si alguno de estos temas te llaman la atención, quiero invitarte al “Círculo Substack” un encuentro online gratuito el próximo domingo 13 de julio a las 20:30 hora Madrid.
Una hora para compartir conversación, reflexiones y aprendizajes sobre la escritura y sobre Substack. Un espacio de preguntas y respuestas. Comenzaré el encuentro compartiendo un concepto del que hablo en mi curso de Substack y después…dejaré el ”micro abierto”. Quiero conoceros y conectar.
Escribir esta publicación me ha dado que pensar…Por ahora, este mes de julio es de reconocimiento. De reconocimiento hacia mí. Por el camino recorrido. Seguimos🔥
Como siempre, estaré encantada de leer cualquier comentario que te apetezca compartirme.
Con amor,
Julia💛
feliz aniversario, preciosa
Felicidades 💐💐