Tomar decisiones: intuición y las otras voces
¿Cómo diferenciar la voz de la intuición de esas otras voces que tenemos en la cabeza?
En el artículo de esta semana, comparto algunas cualidades específicas de la voz de la intuición y la comparo con el murmullo, a veces incesante, de esas otras voces mentales. Espero que este conocimiento te resulte útil y que lo puedas aplicar ante la toma de una decisión importante. No obstante, lo que comparto en esta publicación se basa en mi propia experiencia y en mis observaciones personales, por ello, no lo des por sentado. Pásalo por tu propio filtro.
Intuición
[1] Facultad de comprender o concebir una idea de manera evidente, íntima a instantánea sin necesidad de razonamiento. [2] El conocimiento adquirido a través de la intuición, no sigue un camino racional para su construcción y formulación, por lo tanto, no puede explicarse o, incluso, verbalizarse.
¿Qué características y cualidades tiene la voz de la intuición?
Entendimiento. Certeza interna.
Escuchar a tu intuición trae consigo una sensación de entendimiento aunque no sea el entendimiento racional al que estamos acostumbrados. Tu intuición te aporta una comprensión del tipo: ‘ah, ok, no entiendo exactamente el porqué de esto pero sé que de alguna manera, tiene sentido’. Es como si algo hiciese click. Se puede sentir también como tener un ‘ahá moment’.
Seguir a tu intuición puede llegar a generar miedo y dudas. Es un miedo a lo desconocido. La intuición señala caminos fuera de la lógica por lo que resulta difícil establecer los pasos a seguir. Generalmente no sabes cómo vas a llegar al objetivo que has escogido y eso puede llegar a intimidarte o frustrarte. CONFÍA. Sigue esa certeza interna, aunque no puedas vislumbrar -todavía- el cómo llevarla a cabo. No estamos aquí para averiguar el cómo, si no el qué. El cómo se despliega solo.
Expansión. Posibilidad. Ilusión.
Los pensamientos intuitivos te abren puertas hacia otras posibilidades que buscan traerte expansión. Cuando tomamos una decisión basada en nuestra intuición, nos sentimos relajados. Por el contrario, las opciones que no son realmente para ti, te cierran puertas ya que, por lo general, sólo ofrecen una opción posible - ‘blanco o negro’o ‘ahora o nunca’- lo que nos puede hacer sentir estancadxs o constreñidxs.
Los pensamientos intrusivos te mantienen atrapadx en tu cabeza, cierran tu visión y te dejan rumiando acerca del qué hacer o cómo actuar.
Si nos damos cuenta de que empezamos a justificar una opción con argumentos –o excusas - racionales, es mejor dejarla pasar. Cuando es un SÍ, se siente en todo el cuerpo. Hay ilusión, hay entusiasmo, hay ganas.
Atemporalidad.
Dejar pasar algunas opciones, como, por ejemplo, una oportunidad de trabajo, suele suponer un corte o ruptura, se siente como una pérdida ya que exige que digas ‘no’ y que pongas límites.
En cambio, si decides no seguir los susurros de tu intuición, no pasa nada. No se ‘enfada’, la vida simplemente sigue.
Lo que es, llegará cuando tenga que llegar, pasará si tiene que pasar y si no, simplemente ocurrirá otra cosa.
La voz de la intuición se mantiene constante y estable en el tiempo y aunque la información recibida sea inmediata, te sugiere o te informa de algo en el medio o largo plazo.
Suavidad. Tranquilidad. Calma.
Cuando sigues tu intuición, aún con miedo o con resistencia o dudas, te sientes en paz, te sabes guiadx.
La voz de la intuición no es invasiva, es suave. La intuición nos habla una o dos veces, pero no nos abruma con pensamientos en bucle. En cambio, los pensamientos ansiosos o intrusivos suelen ocupar todo tu espacio, hacen más ruido porque generalmente requieren que actuemos YA. La voz de la ansiedad, a menudo, viene acompañada de una sensación de ‘me estoy perdiendo algo’ y te hace sentir intranquilx.
La voz de la intuición no transmite urgencia. Por eso, si no estás segurx de qué camino o decisión tomar: ESPERA. Toma distancia – temporal, mental y física.
Intimidad. Profundidad.
Los pensamientos intuitivos no llegan a través de un estímulo externo, Hay oportunidades que se presentan en nuestra puerta; llegan desde fuera y, en ocasiones, las aceptaremos sin reparo. No obstante, la voz de tu intuición no necesita que haya ‘disparadores’ externos, te susurra desde el interior.
La intuición se siente en diferentes partes del cuerpo, en lugares profundos como las entrañas, el diafragma o el pecho, no sólo se escucha en la mente.
Empeño. Determinación. Compromiso.
No quiero dar la impresión de que seguir a nuestra intuición es fácil y fluido y que, una vez tomada la decisión todo llegará solo. La intuición nos invita a que sigamos esos caminos desconocidos, pero, eventualmente, es nuestra responsabilidad tomar acción.
‘We still have to do the work’
Debemos comprometernos con la decisión tomada y necesitaremos nuestra determinación, constancia y disciplina para llevarla a cabo. El camino lo andamos nosotrxs, dando un paso tras otro, no a grandes zancadas.
‘Todo está bien’
Cierro esta publicación con un último apunte que me parece necesario recordar, especialmente a la hora de tomar decisiones: ‘Todo esta bien’.
No hay ninguna decisión ni buena ni mala, cada decisión, es simplemente una opción y al tomarla, abrimos un camino y cerramos otros. Cualquier camino que decidas escoger, es el que te toca vivir en ese momento. Después de escogerlo, solo quédate atentx a observar cómo te sientes y a cómo se desencadenan los acontecimientos. Tomemos nota, recibamos los aprendizajes y sigamos.
Gracias al proyecto del café en Tepoztlán el cual compartí la semana pasada, me di cuenta de que sólo tenía que decidir; si finalmente me hubiese enfrascado en esa aventura, me habría aportado otros aprendizajes, me habría llevado a otra versión de Julia. Pero la Julia de hace dos años escuchó y decidió que ese café no tocaba, que le apetecía otro camino, un camino que, por aquel entonces, aún pintaba desconocido y turbio pero que se sentía mas auténtico y genuino. Ese es el camino que, a día de hoy, estoy andando.
Con amor,
Julia
Hasta aquí mis observaciones. Hay infinitos puntos de vista, así que abro este espacio para que lo completéis con vuestras propias observaciones, experiencias o recursos. Os abrazo. Gracias por ser parte❣️😘
Genial compilación, Julia, y muy acertada! A mí me pasa a menudo cuando conecto con esa voz interior que la certeza se siente como una sonrisa interna. Cuando pregunto algo y la respuesta me viene con suavidad y claridad hay también un punto de humor, de no tomarse los dramas humanos (especialmente los propios) tan en serio, que me hace sonreír. Gracias por compartir esta lista tan valiosa! Un abrazo 💜 M.
he compartido muchas partes de esta publicación porque es mi forma de guardármelas para un futuro . . me han parecido muy interesantes y valiosas tus observaciones . . hace un par de semanas estuve tentada de apuntarme a un taller para aprender a dejarte guiar por la intuición, pero estoy a muchas cosas ya y no lo hice . . pero me interesa mucho este tema . . porque el ego habla todo el tiempo y a veces cuesta distinguir su voz de la de la intuición . . últimamente diría que la escucho mucho mejor y que tengo muy pocas dudas . . tengo como instalada una certeza grande encima y creo que es gracias a ella